La Masacre de Creel ocurrió el 16 de agosto del 2008. Personas armadas llegaron al pueblo de Creel y dispararon contra un grupo de personas que se encontraban reunidos. 13 personas fueron asesinadas, entre ellos un bebé de un año siete meses.
Se celebró la misa en la plaza de la paz, donde se pintó un mural en conmemoración de las víctimas.